Fans de la BC: no me acribillen… pero, en vez de comprarse una mermelada light, insulsa y llena de ese veneno llamado edulcorante, les recomiendo que prueben la St. Dalfour, que además de ser más rica –al menos para mí-, sólo está endulzada con el jugo natural de las frutas y no tiene azúcar agregada.
Bonus Point: cuando se termine, podés usarla como florero, tal como muestro en la foto. Si sos fan de la Bonne Maman, te tengo malas noticias… su envase es divino, sí, pero es una de las mermeladas con mayor cantidad de azúcar del mercado.