En Grey’s Anatomy, el gran Richard Webber asegura que "with coffee, and a little sunlight, your problems will get smaller, and the world will keep standing". Yo coincido. ¿Y vos? Las pequeñas cosas son el mejor antídoto contra la tristeza o el mal humor. Está comprobado (?) que detenernos a registrar esas pavadas no-tan-pavas que nos alegran la vida es de los mejores remedios para el alma. Soy adicta a crear nuevas listas de iPhone. ¿Te pasa lo mismo? Una de las mías se llama “Feel Good List”, y en ella anoto todo lo que registro que me hace bien: un Chai en Starbucks, almuerzos o caminatas con amigas, rezar; comer chocolate, salida de novios con mi marido, planear un viaje, fantasear con tener mi casita con jardín de invierno, como la de la foto... y etcétera. La idea no es solo acudir a estos antídotos cuando estoy en un mal día (o racha), sino darme cuenta de que hay muchas otras cosas, o personas, que a priori hubiera jurado que entraban en la Feel Good List pero que oh, sorpresa, no están. No todos los comportamientos que supuestamente nos hacen sentir mejor cumplen su cometido, y no todas las relaciones que a primera vista son cercanas y/o sanas, nos dejan una linda sensación. Te invito a que revises y, si te dan ganas, hasta anotes, qué iría en tu Feel Good List.