Cuando viajo, trato de ser prolija y leer al menos -algo- de ficción que esté relacionado con el nuevo lugar por descubrir. Esta temporada tuve la suerte de visitar varias veces a los Cotswolds (en breve les dedico un post), y en cada nuevo viaje confirmé que es de los lugares más lindos de Inglaterra, lo cual no es poco decir... Entonces, quise hacerle justicia a la zona leyendo aquel que es "el" libro de la región: Cider with Rosie (y les prometo que la coincidencia con mi nombre no es más que eso, una casualidad). Esta novela semiautobiográfica de Laurie Lee versa sobre la infancia del protagonista en un pueblito de Gloucestershire, justo después de la Primera Guerra Mundial. En sus páginas aprendemos cómo era la vida aldeana de ese entonces, evaporada luego por avances tecnológicos como la electricidad o el auto a motor. Toda la obra está teñida de nostalgia por la belleza bucólica de otrora. Con la agudeza y sensibilidad de la prosa de Lee, que deschava su formación como poeta, se logró congelar un tiempo y espacio hoy perdidos; se los retrata con melancolía pero sin caer en clichés rosas o sesgados: el autor deja en claro cuáles eran las dificultades domésticas de la época y las detalla muy bien... Este clásico suele leerse en los colegios ingleses y en 2015 la BBC le dedicó un film. Cider with Rosie está escrito para todos aquellos que, de vez en cuando, añoramos el pasado. Los desafío a que lo lean sin remontarse a su propia infancia y, por qué no, a su primer amor.