29 de jul de 20212 min.

La envidia

El abrazo del sábado entre Messi y Neyman nos dejó muchas enseñanzas. En especial, una reflexión sobre la envidia y sobre su cara opuesta: el alegrarse por el bien ajeno.

La envidia es un tema que siempre me costó. Siempre me chocó que se comentara "qué envidia" ante una buena noticia y siempre sentí mucha culpa cuando quien sintió envidia resulté ser yo.
 
Alguna vez me sentí producto de envidia y le echaba la culpa a las malas vibras el que se frustrara algún proyecto personal. Acudí a la famosa pulsera roja y demás amuletos que prometen protegernos de las malas energías ajenas.

Ante la queja de la gente envidiosa, un exsaliente una vez me dijo: "Pero vos, ¿qué hacés para generar envidia en los demás?", y desde entonces me sembró mucho pudor al mostrar algunos aspectos de mi vida. Me empecé a cuestionar cada cosa que compartía en redes -o incluso a mis amigos-.
 
Pero hace poco escuché una charla de Virginia Gawel sobre este tema que cambió mi cabeza.
 
Les comparto los aspectos de la charla que más resonaron en mí:
 
-no existen amuletos mágicos para protegernos de la envidia. El mejor amuleto es contar con uno mismo.
 
-no se puede vivir con miedo a la envidia porque yo no controlo lo que el otro siente. El miedo a ser envidiados nos puede hacer tener miedo a brillar. Y todos fuimos llamados a brillar.
 
-que te envidien significa que lograste algo en la vida. Que sos plena, te desplegás, sos querida.
 
-sentir envidia es natural, algo que se nos escapa, como tener una pesadilla. El malvado es aquel que, a través de la envidia, quiere destruir lo que el otro tiene, o le desea lo peor, pero sentir envidia es humano y puede sucederle incluso a quien más nos ama.
 
-la solución de la envidia es amar. El amor hace que la envidia no se expanda.
 
-debemos curtir nuestro espíritu para que la envidia ajena no nos lastime. NUNCA dejar de hacer todo lo que vinimos a hacer al mundo por miedo a que el otro nos envidie.
 
-habiendo dicho esto, debemos ir sencillos por la vida. La arrogancia nunca es buena consejera.

El tema da para mucho. Me interesa saber qué te genera a vos.

Espero tus comentarios,
 
Rosie

Ilustración: @tatisoko